Esta obra muestra a través de la experiencia clínica y de muchas horas dedicadas a la atención de niños la premisa de que «dentro de cada niño existe una historia que necesita contarse, una historia que nadie más ha tenido tiempo de escuchar»
(D. Winnicott).
Las autoras realizan un exhaustivo análisis teórico de la evolutiva del niño, el dibujo como medio de expresión y de simbolización y su relación con los trastornos que provoca el maltrato infantil. Nos convocan a ser testigos de cómo cada niño en su particular singularidad puede dar cuenta de lo sufrido a través de sus dibujos los cuales junto con el juego son la vía regia de expresión de los más pequeños
(Dra. Rosa Inés Colombo).