El trabajo de investigación que aquí se presenta parte de la inquietud intelectual y la mirada sociológica sobre el tema que tienen Julieta Pojomovsky y su equipo, quienes poseen una importante experiencia en la gestión institucional y una preocupación política por la niñez en la calle como problema social. «Con esta doble mirada realizan una investigación de amplio alcance a lo largo de una década, estudiando una población de más de 1.600 niños, niñas y adolescentes que de distintas maneras ocupan el espacio callejero. Es por ello que el libro aporta nuevos conocimientos que interpelan tanto al campo de estudios como a las políticas dirigidas al sector.
Una serie de variados interrogantes rodean las temáticas analizadas en el Tomo I: ¿Cuán diferentes del resto de la infancia y adolescencia son estos chicos y chicas que sobreviven como pueden en las calles de la ciudad? Y si son diferentes: ¿dónde radica la diferencia? ¿Cuán diferentes son sus familias de otras de los sectores populares de donde provienen? ¿Por qué la mayoría de los chicos y chicas pobres de sus mismos barrios no salen a las calles «del centro» en busca de recursos, compañía y diversión? ¿Qué significado tiene la vida callejera como fuente de recursos materiales y simbólicos al atraer a grupos y/o individuos que la utilizan de forma no «convencional»? ¿Por qué se van de sus hogares? ¿Lo hacen de una vez y para siempre? ¿Por qué muchos de ellos «prueban» la calle pero no se quedan? ¿Estar en la calle es sinónimo de niña/a trabajador/a?